En torno a un 20% compra ropa de segunda mano en España. El consumidor demuestra así estar cada vez más preocupado por la contaminación de la industria textil. Solo en España se desechan 1 millón de toneladas de residuos textiles al año cuya gestión está en manos de una de las entidades que conforman AERESS. Esta asociación lanza la marca global denominada La Recuperadora para aglutinar su actividad en una imagen única. Esta iniciativa creará puesto de trabajo a medio plazo.
En la actualidad, en torno a un 20% de la población compra ropa de segunda mano en España. Un buen dato que refleja el avance en la concienciación hacia el cuidado del planeta y la sostenibilidad. La Asociación de Recuperadores de Economía Social y Solidaria, AERESS, gestiona, en una de sus líneas de trabajo, los desechos textiles que representan 1 millón de toneladas anuales en España. Para impulsar su labor en este ámbito, la asociación ha lanzado La Recuperadora.
Marca global
La Recuperadora es una marca global de ropa y otros productos de segunda mano. Identifica la ropa procedente de la gestión de reutilización desarrollada por las diferentes entidades de la red. Estas recogen y gestionan más de 21.000 toneladas de prendas que se desechan al año. Con este proyecto, AERESS quiere “aglutinar su actividad en una imagen única que transmita transparencia sobre nuestra actividad, que identifique los proyectos de recuperación textil de las entidades asociadas y que resulte reconocida para el consumidor en todo el territorio”, subraya Natalia Castellanos, subdirectora de la asociación y coordinadora de La Recuperadora.
Nuevos puestos de trabajo
Este nuevo proyecto de economía circular tiene también como objetivo crear nuevos puestos de trabajo a medida que se consolide la iniciativa.
El proceso comienza con la recogida de la ropa en los contenedores a nivel local por parte de las entidades de AERESS. A partir de ahí, se inicia una labor de planificación para la reutilización y reparación de las prendas recogidas. Mediante un triaje se decide si podrán tener una segunda vida o llegar a otros procesos de reciclaje.
Una vez recuperadas se preparan para darles salida en el mercado. Se consigue así una fuente de ingresos para las entidades que contribuye al consumo sostenible y a la generación de empleo. De esta manera, se neutralizan más de 38.000 toneladas de CO2 a la atmósfera.
Consolidación de la marca en 2024
Son ya varios los establecimientos asociados en este proyecto en Madrid. Se prevén nuevas aperturas en Barcelona, Girona, Murcia, Mallorca o Gijón.
Natalia Castellanos afirma que las personas ya no solo compran segunda mano por motivos relacionados con el precio o la ecología. Entran en juego más factores como alargar la vida de los productos. https://aeress.org
