La quinta ola de la Covid no ha cambiado demasiado la confianza del consumidor. Desciende el miedo al desempleo en el futuro próximo, crece la confianza en la economía del país y se estabiliza la euforia por la apertura de las actividades de ocio. La recuperación de la normalidad llevará tiempo y no será lineal. Además, preocupa el aumento de la inflación.
La recuperación anímica de los consumidores ha sido rápida pero desequilibrada. En la actualidad, entramos en una situación de estancamiento ya que ha encontrado un límite. Esto se debe a los desequilibrios en la puesta en marcha de una economía mundial “al ralentí”, debido a la subida de los precios de la energía, la inflación y la escasez de suministros. Además, parte de los consumidores ha experimentado un serio descenso de sus ingresos a pesar de los ERTES. Todos estos factores producen una cierta desconfianza.
Aumenta la confianza en la economía
Según el informe, algunos indicadores dispersos sugieren que se ha incrementado la confianza en la economía del país, muy débil desde 2018.
Todos estos datos se deprenden de la tercera edición del Informe Perspectivas del Consumidor de Kantar.
Apuesta por mantener el consumo
El 67% de los consumidores considera que lo más inteligente en este momento es mantener los niveles de consumo. El 25% opina que sería mejor reducirlos.
La valoración de la situación económica del hogar sigue siendo el único indicador en positivo dentro del Índice, aunque baja en los últimos meses.
Las inversiones a largo plazo y los compromisos financieros se miran con recelo. Eso sí, se percibe que lo peor de la crisis ha pasado ya. Aun así, la mayoría prefiere “esperar y ver”.
La euforia experimentada tras la apertura de actividades relacionadas con el ocio del pasado trimestre se estabiliza. Salir al cine o cenar se mantiene igual. Cae la intención de viajar los fines de semana y de disfrutar de largas vacaciones o un crucero.
En general, la valoración del momento para comprar productos y servicios ha bajado 4 puntos respecto al trimestre anterior. Solo aumentan ligeramente ocio, el hogar, los pequeños electrodomésticos y la ropa.
Mejora la percepción sobre el desempleo
Un 84% de los españoles con empleo se siente seguro de cara al futuro próximo. La población española queda dividida entre los que opinan que habrá más, menos o igual desempleo en 2022.
La idea de que los ingresos se mantendrán en los próximos meses vuelve a los niveles prepandemia. Pero también por otro lado, se incrementa la incertidumbre sobre los ingresos. La cuarta parte de los encuestados no sabe cómo evolucionarán. Un 8% considera que pueden descender.
Para Teresa Ledesma, directora asociada de Marketing de Insights Kantar, la naturaleza del rebrote de la inflación en septiembre ha producido un debilitamiento sobre la situación económica de los hogares. “Si se estabiliza, es de esperar que se produzca una regresión del consumo. Aun así, los buenos datos de la pandemia hacen prever que la actitud de los consumidores siga mejorando en los próximos meses”, explica.
