Las perspectivas para las exportaciones del calzado técnico portugués apuntan a alcanzar los 100 millones de euros hasta el final de la década. Un reto para el que el proyecto FAIST, que une a 45 socios, es fundamental, ya que pretende desarrollar una nueva generación de tecnología punta. El objetivo es conseguir a las empresas fabricar pedidos pequeños, medios y grandes a precios competitivos.
Buenas perspectivas para el calzado técnico portugués que trabaja para alcanzar una facturación de 100 millones de euros en sus ventas al exterior. Un reto que pretenden se haga realidad antes del final de esta década gracias al desarrollo del proyecto FAIST. Este programa va a reposicionar la industria del calzado lusa a nivel internacional.
Pedidos a precio competitivo
“Lo importante es que la reindustrialización y el uso de procesos de elevada productividad permitan a las empresas fabricar pedidos pequeños, medianos y grandes a precios competitivos. De esta manera se conseguirá introducirse en las grandes cadenas de distribución, especialmente de los segmentos más técnicos”, explica Florbela Silva, coordinador de FAIST.
La industria portuguesa lleva tiempo invirtiendo recursos en la producción de calzado técnico de alto valor añadido. De hecho, provee a las principales fuerzas de seguridad a nivel internacional; también a hospitales o compañías aéreas. Estas inversiones se están incrementando en la actualidad. Reinaldo Teixeira, presidente del Centro Tecnológico del Calzado confirma, “tenemos todas las condiciones para consolidarnos como una referencia en el desarrollo del calzado técnico”. https://www.ctcp.pt/
Seguridad y diseño
“Portugal se distingue por la competitividad, gran capacidad de adaptación y disponibilidad para acoger proyectos disruptivos y por la flexibilidad productiva”, confirma Teixeira. En términos prácticos, la evolución de esta categoría ha sido proporcional al aumento de la conciencia global sobre la protección y el estado general de buena salud de los trabajadores de todos los sectores. En un primer momento, explica Teófilo Leite, “dimos prioridad a la seguridad en el trabajo, Pero rápidamente percibimos la necesidad de armonizar la seguridad con el diseño; también con las tendencias de moda, selección de materias primas, adaptarse a las normativas, y a la salud del pie. Un área en la que empresa Lavoro ha sido pionera desde hace 15 años”. https://lavoroeurope.com/es/
A nivel técnico, “la producción de calzado profesional es muy exigente”; todos los modelos carecen de certificación en diversos parámetros por lo que no hay espacio para la improvisación.
Por su parte, Alexandre Carneiro, de Abílio P. Carneiro, añade, “la producción de pequeñas series, muchas veces adaptadas a mercados específicos, es una de las ventajas competitivas de producir en Portugal. Además, destaca la agilidad y capacidad de las empresas”. https://apcarneiro.pt/